En lo que llevo de vida me he podido dar cuenta de muchas cosas, pero a una de la que le doy más valor es el poder entender porqué se hacen las cosas. Y al final de tanto pensar he llegado a la conclusión de que nada se hace "porqué sí". Las cosas se hacen por un motivo concreto y que cada persona sabe, ella misma o su inconsciente, de manera que es la intuición la que muchas veces nos lleva a tomar decisiones. Entonces si no tenemos en cuenta el subconsciente tenemos en cuenta el carácter que cada uno forja a partir de sus emociones pasadas y que convierte en sentimientos. Pues, entendamos que el carácter de cada persona es diferente y algunas personas no han podido o no han sabido canalizar las emociones y eso les conlleva a tener comportamientos inadecuados. Entonces el carácter se forja, y de emociones que cada persona canaliza y convierte en sentimientos. Así pues cada persona sabe canalizar una emoción de manera diferente. El resultado es una partícula de ese carácter. A partir de ese carácter se realizan acciones que nosotros creemos que hacemos porqué queremos pero siempre tenemos el carácter o la intuición dictándonoslo todo. Así pues podemos creer que no somos libres a la hora de realizar nuestros actos pero sí que lo podemos conseguir si aprendemos a canalizar y comprender esas emociones y autoforjarnos el carácter; de manera que llegue un momento en la vida que todo lo que hagamos sea como si fuera la última vez.
